Algunas líneas nunca deben cruzarse. Pero a veces la tentación es demasiado buena para resistir...
Mason Black lo era todo para mí: mi padre, mi proveedor, mi protector. Pero luego, un día, desapareció, dejándome perdida y sola.
Estaba devastada.
Años más tarde, justo cuando pensaba que había armado las piezas de mi vida, mi mundo se hizo añicos de nuevo. ¿Todo lo que pensé que sabía sobre mi padre biológico y el papel de Mason en mi vida? Resulta que todo fue mentira.
Cada. Maldita. Palabra.
Ahora Mason ha vuelto. Sin embargo, no ofrece excusas ni explicaciones. Solo quiere que sea lo que dice que siempre he sido: su pequeña niña.
Pero el dolor dentro de mí no se negará. El anhelo que siento no es el de una niña que extraña a su padre.
No. Necesito que Mason sea más que una figura paterna. Más que un protector amoroso.
Necesito que sea mi papá.